DESCUBRE LA HISTORIA DETRÁS DE TU HISTORIA

Nos dedicamos inicialmente a establecer un vínculo con nuestro consultante, explorando el motivo que lo trae a terapia, para hacer posteriormente una indagación emocional en la cual lograremos que hable su inconsciente. Se realiza un trabajo exploratorio-develador, ya que además de entender el conflicto actual, comprenderemos en conjunto de dónde viene y en qué momento se originó esa energía que ha llevado a que hoy, en su vida actual, la persona padezca o sufra esa situación que lo trajo a terapia. Es descubrir la historia detrás de la historia. El comienzo es tomar conciencia de por qué y para qué ocurre. También se identifican las heridas emocionales que generan los programas de conducta.

Durante la segunda sesión, el consultante comprenderá cuál es la información que está emitiendo, y qué es lo que le llega desde el exterior como respuesta a lo que él mismo genera. Para esto, liberaremos las barreras de la mente consciente, que no nos permite mirar en nosotros, y romperemos el mecanismo de defensa que hasta hoy ha hecho ver fuera lo que realmente viene desde dentro de uno mismo. El consultante adquirirá una herramienta que le permitirá de por vida descubrir qué es lo que necesita equilibrar para que la información que le disgusta, se deje de presentar. Observar en sí mismo le permite comprender que el cambio puede ocurrir desde su interior, no desde fuera.

A lo largo de la tercera sesión de terapia, el consultante aprenderá a realizar manejo emocional. La clásica pregunta ¿qué hago para no seguir sintiendo/haciendo lo mismo? queda resuelta a través de esta técnica donde el paciente encontrará recursos internos para responder de una forma diferente a como lo ha hecho hasta ahora, frente a situaciones emocionalmente difíciles. En este punto, comienza la desprogramación o desaprendizaje de emociones que hasta el momento se habían desencadenado de manera automática. Si el máximo estrés no dispara el programa o la reacción, este se interrumpe y deja de repetir.

Durante esta sesión, se trabajará en la integración de todo aquello que el paciente no acepta de sí mismo, le avergüenza o niega, para así lograr trascenderlo. Cuando se trasciende la sombra, se sientan las bases del encuentro con uno mismo desde la aceptación completa y la autenticidad real, lo cual permite entrar en coherencia a nuestra mente consciente e inconsciente. Integrar la sombra es fundamental para la aceptación completa de nuestra personalidad.

En este momento, el consultante ya es capaz de ir un paso más allá hacia el nivel espiritual. Se le acompañará a liberar esas emociones que se adquirieron cuando se encontraba en el vientre materno y que en la actualidad resultan inexplicables. A través de esta sesión, se trabajará también lo que se denomina “proyecto sentido”: la información y mandatos que recibimos en torno a nuestro nacimiento que determinan desde la inconsciencia nuestra vida adulta.

Esta es una instancia fundamentalmente de perdón. Todo aquello revisado durante la primera sesión queda comprendido desde su raíz espiritual. Se trabaja la aceptación de los padres y se comprende que como almas incluso hemos elegido esas relaciones y situaciones difíciles para ver nuestra propia energía y trascenderla. Al perdonar a los demás, te perdonas también a ti mismo. Los modelos de aplicación a utilizar apuntan directamente a ser actos simbólicos que destraben desde el inconsciente.

Llegados a este punto, podemos liberar esa energía base que nos estaba llevando a vivir los conflictos que se repetían incesantemente. La integración de actos simbólicos continúa para seguir conversando con la mente inconsciente y liberando los bloqueos emocionales desde lo más profundo de nuestra psique.

En esta sesión de cierre, hacemos una revisión del proceso completo, generando un nuevo compromiso con nuestra alma. Se revisan todas las etapas y se evalúa si se debe revisar cualquier emoción que haya quedado pendiente. De no ser así, se cierra el proceso y se espera una revisión en al menos 6 meses.