Los 12 primeros días del mes tienen un simbolismo inconsciente, correspondiéndose
con los 12 meses del año. Aprovechar la emoción que se presenta en estos días puede ser una forma perfecta de desaprender y reprogramar.
El simbolismo de los primeros 12 días del año nos invita a considerarlos como un microcosmos del ciclo anual, donde cada día representa un mes y un arquetipo específico en nuestra psique. Según Carl Jung, los arquetipos son patrones universales que habitan en el inconsciente colectivo, y al trabajar conscientemente con ellos durante este período, podemos acceder a una poderosa herramienta de reprogramación mental y emocional.


Este enfoque parte de la premisa que cada día es una oportunidad para sembrar intenciones alineadas con nuestras metas y aspiraciones, estableciendo un "contrato simbólico" con nuestro yo interior y el cosmos.


Por ejemplo, el día 1 simboliza el nacimiento y la iniciación, mientras que el día 12 puede reflejar la culminación y el cierre de ciclos. Al llevar a cabo prácticas como la meditación, el journaling o rituales específicos durante estos días, estamos cultivando una semilla de conciencia en el terreno fértil de nuestra mente subconsciente, que germinará a lo largo del año.

Este proceso no solo nos ayuda a manifestar lo que deseamos cosechar en 2025, sino que también nos conecta con un sentido más profundo de propósito y transformación personal, integrando mente, emoción y espíritu en una danza creativa con el tiempo.